LA EVALUACIÓN:
UNA ESTRATEGIA A NIVEL INTERNACIONAL PARA EL MEJORAMIENTO DE LA CALIDAD EDUCATIVA
UNA ESTRATEGIA A NIVEL INTERNACIONAL PARA EL MEJORAMIENTO DE LA CALIDAD EDUCATIVA
¿POR QUÉ SURGEN LOS SISTEMAS DE EVALUACIÓN EN LOS DISTINTOS PAÍSES?
La implementación de sistemas de evaluación
está asociada fundamentalmente a un creciente interés
por los resultados de la calidad de la educación, tales sistemas
surgen principalmente en razón a:
- La necesidad de saber si los
estudiantes realmente están adquiriendo los conocimientos,
competencias, actitudes y valores necesarios para desempeñarse
con éxito en la sociedad y para convivir armónicamente
en comunidad.
- Los indicadores de matrícula,
cobertura, deserción y repitencia, tradicionalmente utilizados
para medir los resultados de un sistema educativo, se consideran insuficientes,
pues no dan real cuenta de la calidad de la educación que se
imparte en las instituciones escolares[1]. Ello en razón a
que la calidad de la educación no es fácilmente visible
para los diferentes actores de la comunidad educativa ni para la sociedad
en general, en comparación con otras actividades humanas en
las que es más sencillo apreciar los resultados de lo que se
hace [2].
- En una parte de los casos,
la creación de sistemas nacionales de evaluación de
aprendizajes ha sido impulsada por organismos internacionales de crédito
como parte de sus convenios de otorgamiento de préstamos a
los países. No obstante, es de aclarar que las características
específicas de cada sistema de evaluación adoptado por
cada país en particular, dependen más de sus capacidades
técnicas y de sus propias decisiones políticas que de
directivas de dichos organismos [3].
Aunque es de aclarar, que esta afirmación ha sido insistentemente desafiada, por quienes afirman que independientemente de las políticas de las últimas dos décadas, la evaluación estandarizada y el estudio de factores asociados al logro fortalecen los cimientos democráticos de los sistemas educativos, en tanto permiten la opinión informada y la demanda de los beneficiarios, a la vez que el establecimiento de mecanismos de compensación para asistir a las comunidades escolares que más lo necesitan por parte del Estado [4].
Además, la Declaración Final de la
V Conferencia Iberoamericana de Educación, subraya, dentro de
las once prioridades educativas propuestas por los Ministros, la necesidad
de mejorar sustancialmente la calidad de los distintos niveles educativos,
a partir de una evaluación continua que permita conocer las capacidades
y límites del sistema y oriente las políticas de equidad
y compensación.
Para el caso de Colombia en particular, la evaluación
que se hace de los aprendizajes también responde a una de las
recomendaciones en educación que hiciera la Misión Nacional
de Ciencia, Educación y Desarrollo, la cual propone reorganizar
los exámenes de Estado y establecer otros exámenes de
evaluación de la calidad, que como no son propiamente exámenes
de Estado, no tendrán carácter obligatorio para los estudiantes;
pero si lo tendrán para las instituciones que fueran seleccionadas
como parte de una muestra local, regional o nacional [5]. Ello se enmarca
en uno de los planteamientos centrales de dicha Misión, en el
cual se manifiesta que el cambio que necesita Colombia se dé
en el campo del mejoramiento de la calidad educativa, para lo cual plantea
la urgencia de fortalecer el Sistema Nacional de Evaluación,
de manera que el país cuente con la capacidad de hacer las evaluaciones
requeridas y de divulgar, analizar y discutir la información
obtenida.
¿QUÉ MIDEN LAS EVALUACIONES?
Desde el Ministerio de Educación Nacional
se afirma que una educación es de calidad en la medida en que
los estudiantes logren los objetivos propuestos, o alcancen lo que se
espera de ellos; en otras palabras: “que aprendan lo que tienen
que aprender, en el momento en que lo tienen que aprender y que lo hagan
en felicidad” [6]. Es por esa razón, que los sistemas de
evaluación dentro y fuera del país centran su atención
y sus esfuerzos fundamentalmente en conocer el logro cognitivo de los
estudiantes, bien sea en términos de conocimientos, competencias,
habilidades del pensamiento, saberes, actitudes, etc.; pues se puede
decir que en el aprendizaje de los estudiantes se “resume”
o se debe reflejar la mayor parte de todo el quehacer educativo, de
todo el trabajo escolar, ya que de muy poco sirve contar con docentes
muy preparados, con un plan de estudios bien diseñado, con buenas
instalaciones físicas y con excelentes recursos didácticos,
si los estudiantes no aprenden, o si escasamente alcanzan las metas
básicas propuestas. Aunque no todas las evaluaciones están
orientadas a medir exactamente lo mismo, la mayoría de países
coinciden en evaluar las áreas centrales del currículo:
Lenguaje, Matemáticas, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales,
principalmente. “En algunos casos también se evalúan
campos no cognitivos como el desarrollo personal y social, aunque estas
evaluaciones han tenido básicamente un carácter experimental
y, por decirlo de alguna manera, se encuentran en su mayoría
en fase de exploración en los países en los que se han
implantado sistemas de evaluación” [7].
En general se evalúa la finalización
de un ciclo y un grado intermedio, o simplemente la finalización
de un ciclo, regularmente con una periodicidad anual y en forma muestral
y/o censal, mediante pruebas estandarizadas de selección múltiple
y de respuestas cortas. Cuando se realiza evaluación muestral,
el objetivo principal es hacer un monitoreo al sistema educativo nacional;
mientras que en las evaluaciones censales se persigue fundamentalmente
hacer seguimiento a la efectividad de las instituciones escolares.
Según el Programa de Cooperación
Iberoamericana en Evaluación de la Calidad de la Educación
de la OEI (Organización de Estados Iberoamericanos), en los últimos
años se han producido en el ámbito internacional avances
notables en el desarrollo de la evaluación, entendida como instrumento
al servicio de la política y la administración de la educación
–con miras a lograr efectos positivos en la calidad educativa-,
la cual adquiere mayor importancia con los procesos de reforma educativa,
en los que se concibe la evaluación como un componente estratégico
destinado a brindar información útil para la toma de decisiones.
En el caso de Chile, el objetivo
es medir regularmente el estado y progreso de los logros de aprendizaje
de los estudiantes, a través de la medición no solo de
contenidos, sino también de habilidades superiores de pensamiento.
Argentina por su parte, tiene como objetivo brindar
información sobre qué y cuánto aprenden los estudiantes
durante su paso por el sistema educativo, así como indagar en
qué medida van adquiriendo las capacidades y los contenidos de
su propio desarrollo que los diseños curriculares y la sociedad
misma requieren [8].
España con la evaluación
busca conocer el nivel de rendimiento académico logrado por los
estudiantes y establecer una línea base que permita analizar
el progreso educativo del sistema escolar a través del tiempo.
Un objetivo similar tiene Perú, cual es, evaluar
el rendimiento estudiantil para obtener información que permita
conocer el estado de la calidad de la educación. Entre tanto,
México se propone observar la evolución
del logro escolar a partir de la estimación del rendimiento académico
en las distintas asignaturas.
Bolivia por su parte, manifiesta
que su objetivo es proporcionar información en forma periódica,
confiable y válida acerca de los niveles alcanzados por los educandos
en cuanto a las adquisiciones y desarrollo de las competencias. Así
mismo, Venezuela tiene como propósito suministrar
información oportuna, periódica, válida y confiable
acerca de las competencias adquiridas por el estudiante en su recorrido
por el sistema educativo.
Otros países como el caso de Brasil,
Uruguay, Honduras, Cuba y Costa Rica, también fundamentan
sus sistemas de evaluación en pruebas periódicas dirigidas
a los estudiantes de ciertos grados de la educación primaria
y secundaria en las áreas básicas [9].
En cuanto a países industrializados se refiere,
Francia, Estados Unidos, Italia e Inglaterra por su parte, evalúan
con el objetivo de hacer un monitoreo y seguimiento de sus respectivos
sistemas educativos y de la efectividad institucional escolar.
¿QUÉ OTRO ASPECTO SE EVALÚA, ADEMÁS DEL APRENDIZAJE DE LOS ESTUDIANTES?
Complementario a las evaluaciones del aprendizaje,
se ha encontrado que en la mayoría de los países –entre
ellos Argentina, España, Perú, Bolivia y Venezuela-, recogen
y analizan información acerca de los factores asociados al aprendizaje,
o sea, aquellas condiciones intra y extra escolares que explican los
resultados de los estudiantes en las evaluaciones. En el caso particular
de Argentina, aplican "cuestionarios auto-administrados" a
los directivos, docentes y estudiantes, a fin de recoger información
acerca de las condiciones materiales, institucionales y sociales en
las cuales la comunidad educativa desarrolla sus respectivas tareas.
Tiene por objeto describir algunas recurrencias o características
comunes que contribuyan a identificar y explicar algunas variables institucionales
y socioculturales que inciden en el desempeño académico.
Adicional a la evaluación de los estudiantes,
en México han creado un programa denominado: “Aprovechamiento
escolar” de Carrera Magisterial. En este programa los docentes
en forma voluntaria se someten a una evaluación anual del desempeño,
que incluye las actividades diarias en el aula (35 puntos), las habilidades
profesionales (25 puntos), la educación (15 puntos), la realización
de cursos acreditados (15 puntos) y la antigüedad (10 puntos).
Sobre la base de los resultados de la evaluación se concede a
los maestros aumentos de sueldo.
En Chile también han implementado un programa
similar, llamado Asignación de Excelencia Pedagógica (AEP),
cuyo propósito es lograr el fortalecimiento de la calidad de
la educación a través del reconocimiento del mérito
profesional de los docentes de aula. Se trata de un proceso de acreditación
voluntario que permite identificar a los docentes que demuestren tener
conocimientos, habilidades y competencias de excelencia en su desempeño
profesional, quienes serán los beneficiarios de la AEP. Tal asignación
consiste en un beneficio económico que se pagará a los
profesores acreditados como docentes de excelencia; además, tendrán
un reconocimiento público por sus méritos profesionales
y podrán optar a formar parte de la Red de Maestros de Maestros,
cuya finalidad es contribuir al desarrollo profesional de los docentes
en ejercicio. El modelo de medición de la Prueba AEP, define
operacionalmente los criterios contenidos en los cuatro dominios de
los Estándares de Desempeño para la Asignación
de Excelencia Pedagógica: Preparación del proceso de enseñanza;
Creación de un ambiente propicio para el aprendizaje; Desarrollo
del proceso de enseñanza para el aprendizaje; y Responsabilidades
profesionales de los docentes [10].
España además, realizó un
diagnóstico general del sistema educativo, el cual abarca los
siguientes aspectos: 1) Los resultados de rendimiento de los estudiantes
de 14 y 16 años en las principales áreas del currículo.
2) Los planes de estudios y métodos de enseñanza utilizados
a esas edades. 3) El funcionamiento de los centros docentes y, en particular,
la función directiva, la participación de la comunidad
escolar y la convivencia en los centros. 4) La función docente
examinando los temas de formación inicial y permanente y las
responsabilidades específicas del profesorado. 5) El contexto
socio-educativo y especialmente las relaciones entre la familia y el
centro educativo.
¿PARA QUÉ SIRVEN LAS EVALUACIONES?
La evaluación se ha posicionado a nivel
internacional como una herramienta útil para el mejoramiento
de la calidad educativa, ya que al aproximarse con ella al estado actual
de la educación en determinada región o país, proporciona
información que permite establecer fortalezas y debilidades que
orientan el diseño de políticas y la definición
de programas por parte de los organismos rectores del sector, así
como también, la elaboración de planes de mejoramiento
por parte de las mismas instituciones escolares; además, es fuente
importante para la realización de investigaciones educativas
e innovaciones pedagógicas.
En otras palabras, la finalidad de estas evaluaciones
es obtener información confiable que permita tomar decisiones
hacia un mejoramiento continuo y progresivo de la calidad de la educación.
En varios de los países mencionados se han implementado programas
focalizados que han permitido mejorar la calidad de los aprendizajes
de los estudiantes; así como también, acciones dirigidas
a retro-alimentar y enriquecer el trabajo de los docentes.
En complemento a lo anterior, el PREAL (Programa
de Promoción de la Reforma Educativa en América Latina
y el Caribe), ha identificado, entre otros, los siguientes fines de
los sistemas de evaluación:
- Informar a la opinión pública sobre la calidad educativa y generar cultura social de la evaluación.
- Proporcionar información para investigación aplicada sobre impacto de variables sociales y escolares sobre el aprendizaje y los tipos de intervenciones más efectivos.
- Identificar áreas o unidades prioritarias de intervención focalizada para garantizar igualdad de oportunidades.
- Motivar mejoras y logros, vía la comparación o emulación.
- Identificar deficiencias en los resultados de los sistemas educativos y movilizar apoyo público para intervenciones alrededor de metas claras de aprendizaje.
- Devolver información a escuelas y maestros para análisis y planes de mejoramiento.
- Brindar a padres información para evaluar y controlar calidad.
- Contribuir a establecer o monitorear estándares de calidad.
- Certificar el dominio de competencias por estudiantes que finalizan un determinado nivel de enseñanza.
- Seleccionar a estudiantes, escuelas o jurisdicciones para incentivos y acceso a programas.
- Evaluar impacto de políticas, innovaciones o programas específicos.
- Retroalimentar el currículo y los planes de estudio.
- Realizar estudios de costo-beneficio que orienten decisiones sobre distribución de recursos.
- Contar con argumentos para gestión de presupuesto o justificar cambios en orientaciones.
- Analizar el peso del factor docente en los aprendizajes e influir en la formación, capacitación y desempeño de los maestros. Así como también, para establecer un sistema de incentivos
- Promover una responsabilidad efectiva de todos los actores involucrados en los procesos educativos, incluyendo a los propios estudiantes.
LAS PRUEBAS INTERNACIONALES
Si bien es cierto, cada país cuenta con
su propio sistema de evaluación, también existen organismos
internacionales que aplican pruebas en diferentes países, las
cuales son consideradas como medidas comparables de resultados educativos
que se toman simultáneamente en un número de países,
y que recogen información sobre logros de aprendizaje en diferentes
disciplinas y los factores asociados (características familiares
y socioculturales de los estudiantes, infraestructura escolar, preparación
académica de los docentes, entre otros). Los resultados de estas
pruebas se entregan a cada país evaluado con el fin de retroalimentar
sus propios sistemas educativos en general y evaluativos en particular.
Para muchos investigadores y tomadores de decisiones
sobre políticas educativas, la participación en pruebas
internacionales constituye una “intervención en sí
misma”, independientemente de los resultados del estudio, y alerta
a educadores e investigadores sobre problemas que podrían no
haber considerado anteriormente. Además, estas pruebas tienden
a desarrollarse como un instrumento para conseguir insumos de información
para el diseño y mejoramiento de políticas educativas
orientadas a elevar la calidad de los aprendizajes [11].
Entre los beneficios de la participación
de los países en las pruebas internacionales se destaca el hecho
de que los resultados comparados internacionalmente atraen la atención
de los medios de comunicación, movilizan fuerzas políticas
y suscitan debates sobre las implicaciones prácticas de los resultados
obtenidos; asimismo, se desarrolla la capacidad local para la medición
de aprendizajes en la medida en que educadores e investigadores de la
educación se ven llamados a interactuar con especialistas internacionales
y así se mantienen actualizados; además, se conoce la
efectividad de las políticas implementadas por otros países
y también se obtiene información sobre los factores familiares
y sociales que afectan el desempeño académico.
Entre los problemas que se han identificado está
el hecho de que los resultados de los estudios, en particular cuando
se presentan como ranking de logro entre países, suelen desatar
comentarios y críticas por parte de los políticos, los
medios de comunicación y el público, en los que solo importa
la posición relativa de logro en el escenario internacional y
no la abundante información sobre factores sociales, escolares
y personales asociados al desempeño. La prensa, particularmente,
tiende a desconocer los aspectos más complejos y auténticamente
informativos de los resultados y solo destaca las posiciones en el ranking,
generando desinformación. De otra parte, los indicadores, interpretados
aisladamente de su contexto cultural y estructural, pueden conducir
a interpretaciones y acciones de política equivocadas; además,
a menudo se toman decisiones de política sobre la base de interpretaciones
de causalidad entre las variables estudiadas, cuando en realidad esa
causalidad solo podría confirmarse mediante estudios experimentales
controlados [12].
Las evaluaciones internacionales permiten reconocer
que sin importar las diferencias entre los países evaluados,
hay un núcleo común de competencias y conocimientos que,
en un mundo cada vez más integrado, es indispensable que todos
los estudiantes adquieran. La participación de los países
en estas pruebas, realizadas por agencias privadas u organismos intergubernamentales,
no es muestral sino voluntaria, es decir, cada Estado paga por ser evaluado.
Aunque estas pruebas son diferentes a las que aplican los sistemas nacionales
de evaluación, también se deben tener en cuenta cuando
se vaya a valorar la calidad de la educación, no solo al interior
de un país, sino en un contexto internacional [13].
A continuación se expone una breve reseña
de las pruebas internacionales más importantes en las que han
participado países latinoamericanos:
PRUEBA PISA (Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes)
Prueba comparativa de la Organización para
la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), se aplica
regularmente en países de todo el mundo a estudiantes de 15 años
de edad, cualquiera sea su grado de escolarización, con el fin
de determinar en que medida estos jóvenes, que se aproximan al
fin de la escolaridad obligatoria, están preparados para satisfacer
los desafíos de la sociedad de hoy. La prueba del 2001 evaluó
a 28 países OCDE y 15 países no OCDE, entre ellos, 5 latinoamericanos:
Chile, Brasil, Perú, México y Argentina.
PISA [http://www.eduteka.org/Pisa2003.php]
mide las habilidades en Lectura, Matemática y Ciencias. El foco
es medir la habilidad de aplicar y relacionar tanto conocimientos como
habilidades en estas áreas, más que en la memorización.
Más bien quiere evaluar la capacidad de aplicar estos conceptos,
los cuales habrán aprendido adentro y afuera de la escuela, para
resolver situaciones de la vida real.
PRUEBA DE CÍVICA DEL IEA (International Association for the Evaluation of Educational Achievement)
Esta prueba -realizada en 1995- hace parte de un
estudio comparado en 28 países sobre el estado del conocimiento
y actitud cívica de los jóvenes escolarizados entre los
14 y 15 años de edad; vale decir que ésta es una de las
dos pruebas internacionales que se han hecho en el mundo sobre el tema
(la otra se hizo en el año 1971) y la única que evaluó
países latinoamericanos (en total fueron 11 del antiguo bloque
socialista, 15 países industrializados y 2 países latinoamericanos).
Colombia ocupó el último lugar en
conocimientos sobre el tema, pero se sitúa dentro de las primeras
opiniones favorables hacia las actitudes como: la democracia y la participación
ciudadana (la tolerancia, sentido de la justicia social y compromiso
cívico). Producto del análisis de resultados, se concluye
que hay una devaluación del papel del conocimiento (lo cual se
deriva de los malos conocimientos y habilidades de interpretación
de los estudiantes colombianos); los estudiantes presentan dificultades
en la comprensión analítica de textos y en aquellas preguntas
que requieren juicio crítico y saber teórico.
TERCER ESTUDIO INTERNACIONAL DE MATEMÁTICAS Y CIENCIAS (TIMSS)
Es considerado el proyecto de investigación
y evaluación curricular más importante de la década
de los noventas en la enseñanza de la Matemática y las
Ciencias Naturales, a nivel de educación básica en el
mundo, auspiciado por la IEA. El diseño del TIMSS consideró
al currículo como una variable central en el estudio, como también
la relación entre Ciencias y Matemáticas como componentes
separados del currículo. En Colombia se evaluaron estudiantes
en edad escolar de 13 años, correspondientes a los grados 7°
y 8°.
La participación de Colombia en el TIMSS
ha sido muy importante para conocer el nivel de la educación
en Ciencias y Matemáticas en el país, con referencia a
un nivel internacional, y para identificar las principales deficiencias
que están determinando el estado actual de la enseñanza
de estas asignaturas en el sistema educativo. Información vital
para diseñar programas y acciones de mejoramiento a todo nivel.
Aunque la comparación internacional puede ser el hecho menos
relevante, sí lo son los resultados, que brindan un primer indicador
de las realidades que muestra el estudio para el país, donde
existen grandes diferencias entre el currículo propuesto, el
currículo desarrollado en el aula de clase y el desarrollado
por los estudiantes [14].
PRIMER ESTUDIO INTERNACIONAL COMPARATIVO DEL LLECE (Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación)
El LLECE es la Red de Sistemas de Medición
y Evaluación Educativa de los países de la región,
y un ámbito de discusión y acción técnico-política
sobre temas del aprendizaje, sus variables relacionadas y su traducción
en política pública en educación. En 1997 realizó
un primer estudio internacional comparativo en Lenguaje, Matemática
y Factores Asociados en tercer y cuarto grados de educación básica,
con el propósito de entregar información útil para
formular y ejecutar políticas educativas en los países
de la región, con el fin de mejorar la calidad y equidad de la
educación. Las principales motivaciones para realizar el estudio
comparado fueron la necesidad de establecer una comparación “de
raíz latinoamericana” que contemplara las particularidades
culturales y educativas de la región y obtener información
para apoyar las decisiones de política educativa. Sus objetivos
particulares consisten en la identificación de estándares
de aprendizaje escolar para Latinoamérica y la apreciación
del nivel de logro alcanzado en los países; el fomento del cambio
educativo que permita alcanzar tales estándares; y la formación
de recursos humanos que hagan posible dicho cambio.
En Lenguaje se evaluó por ejemplo, el reconocer
la información específica de un texto y el identificar
el vocabulario relacionado con el sentido de un texto; mientras que
en Matemática se evaluó la lectura de gráficos,
el reconocimiento de patrones, nociones de probabilidades y relaciones
entre datos dados.
Entre los factores asociados se examinó
el contexto familiar del estudiante, la gestión escolar, variables
del currículo y de la gestión pedagógica, y la
gestión pública de las instituciones de nivel nacional.
El estudio dejó de manifiesto que un buen sistema educativo,
o una buena escuela, no tiene porque ser especialmente oneroso. Dentro
de las escuelas estudiadas hay algunas que funcionan en condiciones
desfavorables, pero comparadas con otras de nivel sociocultural más
alto, alcanzan resultados dignos de destacarse [15].
ESTUDIO INTERNACIONAL SOBRE EL PROGRESO EN COMPETENCIA EN LECTURA (PIRLS)
Es un importante proyecto de investigación
educativa -adelantado por la IEA y en el cual participa Colombia- sobre
los logros de los estudiantes en competencia en lectura (procesos de
comprensión, propósitos de la lectura y comportamientos
y actitudes de lectura), que se adelanta en más de 30 países
de todo el mundo. Para el PIRLS [http://www.eduteka.org/EstudioPirls2001.php],
la competencia en lectura se define como la capacidad de comprender
y usar aquellas formas del lenguaje escrito requeridas por la sociedad
y/o valoradas por la persona.
La primera evaluación PIRLS se realizó
en el 2001, y se han programado futuras evaluaciones para los años
2005 y 2009. El estudio está diseñado para medir e interpretar
diferencias entre los sistemas nacionales de educación, con el
fin de ayudar a mejorar la enseñanza y aprendizaje de la lectura
en todo el mundo. En Colombia, el PIRLS evalúa la competencia
en lectura de niños entre los 9 y los 10 años y las experiencias
que tienen en el hogar y en la escuela cuando aprenden a leer.
No obstante las ventajas que representan las pruebas internacionales y el aprovechamiento que se puede derivar de la participación en ellas, se ha observado en la experiencia de la mayor parte de los países latinoamericanos, que los aspectos más débiles de las evaluaciones han sido el de la interpretación de los resultados y su posterior difusión. Estos factores han determinado una reducción de las posibilidades de impacto en el mejoramiento de la implementación de reformas y en la reformulación de objetivos curriculares. Por eso se afirma, que el impacto de la participación en pruebas internacionales depende no solamente del potencial informativo de las pruebas que se aplican, sino también de las estrategias de sensibilización previas y de las estrategias de difusión final de los resultados. Se confirma además, que la ausencia de un diálogo informado entre los funcionarios y usuarios de la información sistemática, resulta en un escaso impacto de las evaluaciones en las decisiones sobre políticas educativas, y sobre políticas curriculares en particular [16].
No obstante las ventajas que representan las pruebas internacionales y el aprovechamiento que se puede derivar de la participación en ellas, se ha observado en la experiencia de la mayor parte de los países latinoamericanos, que los aspectos más débiles de las evaluaciones han sido el de la interpretación de los resultados y su posterior difusión. Estos factores han determinado una reducción de las posibilidades de impacto en el mejoramiento de la implementación de reformas y en la reformulación de objetivos curriculares. Por eso se afirma, que el impacto de la participación en pruebas internacionales depende no solamente del potencial informativo de las pruebas que se aplican, sino también de las estrategias de sensibilización previas y de las estrategias de difusión final de los resultados. Se confirma además, que la ausencia de un diálogo informado entre los funcionarios y usuarios de la información sistemática, resulta en un escaso impacto de las evaluaciones en las decisiones sobre políticas educativas, y sobre políticas curriculares en particular [16].
Por lo anterior, el mismo PREAL recomienda hacer
un seguimiento del tipo de decisiones de política y práctica
educativa -y curricular en particular-, tomadas en función de
los resultados difundidos. Una vez identificadas, sugiere comisionar
o alentar a instituciones académicas el estudio de los resultados
que sobre el aprendizaje de los estudiantes han tenido, o no, esas decisiones
y cambios de prácticas.
NOTAS:
[1] PEÑA, Margarita. Tendencias internacionales en evaluación de la calidad de la educación. En: Hacia una Cultura de la Evaluación. Memorias del Tercer Foro Educativo Distrital. Santafé de Bogotá, julio de 1999. p. 17.
[2] RAVELA, Pedro. Sistemas Nacionales de Evaluación de Aprendizajes. En: Revista Magisterio, educación y pedagogía. Bogotá, D.C., mayo de 2003. p. 11.
[3] Idem.
[4] FERRER, Guillermo y ARREGUI Patricia. Las pruebas internacionales de aprendizaje en América Latina y su impacto en la calidad de la educación: Criterio para guiar futuras aplicaciones. PREAL. Abril de 2003.
[5] ALDANA, E., CHAPARRO, L., GARCÍA MÁRQUEZ G., y otros. Colombia: al filo de la oportunidad. Misión de Ciencia, Educación y Desarrollo. Presidencia de la República. Santafé de Bogotá, 21 de julio de 1994. p. 112.
[6] Palabras del Dr. José Bernardo Toro, Decano Académico de la Facultad de Educación de la Universidad Javeriana de Bogotá, con motivo de su conferencia en el Encuentro Internacional de Educación realizado por el Grupo Santillana en el Hotel Tequendama. Bogotá, D.C. sep. 2002.
[7] PEÑA, Margarita. Tendencias internacionales en evaluación de la calidad de la educación. En: Hacia una Cultura de la Evaluación. Memorias del Tercer Foro Educativo Distrital. Santafé de Bogotá, julio de 1999. p. 18.
[8] CASTILLO, Mauricio. Cuadro comparativo de los sistemas de evaluación en diferentes países de Iberoamérica. Secretaría de Educación de Bogotá, Subdirección de Evaluación y Análisis. Bogotá, D.C. julio del 2002. Documento inédito.
[9] Informe del Programa de Promoción de la Reforma Educativa en América Latina y el Caribe-PREAL, 2001.
[10] CASTILLO, Mauricio. Identificación de otros requerimientos de evaluación de la calidad educativa. Secretaría de Educación de Bogotá, Subdirección de Evaluación y Análisis. Bogotá, D.C. febrero del 2003. Documento inédito.
[11] FERRER, Guillermo y ARREGUI Patricia. Las pruebas internacionales de aprendizaje en América Latina y su impacto en la calidad de la educación: Criterio para guiar futuras aplicaciones. PREAL. Abril de 2003.
[12] Idem.
[13] PEÑA, Margarita. Tendencias internacionales en evaluación de la calidad de la educación. En: Hacia una Cultura de la Evaluación. Memorias del Tercer Foro Educativo Distrital. Santafé de Bogotá, julio de 1999. p. 18.
[14] Análisis y resultados de las pruebas de matemáticas. TIMSS Colombia. Ministerio de Educación Nacional. Bogotá, 1997.
[15] Primer Estudio Internacional Comparativo sobre lenguaje, matemática y factores asociados, para alumnos de 3° y 4° de la educación básica. Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación.
[16] FERRER, Guillermo y ARREGUI Patricia. Las pruebas internacionales de aprendizaje en América Latina y su impacto en la calidad de la educación: Criterio para guiar futuras aplicaciones. PREAL. Abril de 2003.
CRÉDITOS:
Documento Compilado por Mauricio Castillo Sánchez, Profesional especializado, Subdirección de Evaluación y Análisis, Secretaría de Educación de Bogotá. Agosto 20 de 2003. http://www.sedbogota.edu.co
Publicación de este documento en EDUTEKA:
Febrero 14 de 2004.
Última modificación de este documento: Febrero 14 de 2004.
Última modificación de este documento: Febrero 14 de 2004.
Autor de este documento: Mauricio Castillo Sánchez
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